La mayoría de las pequeñas empresas necesitan financiación para afrontar su día a día o adquirir los recursos imprescindibles para llevar adelante su actividad. En este escenario, contar con diferentes fuentes de financiación puede marcar la diferencia entre un negocio exitoso y un fracaso. El leasing y el factoring son dos vías de financiación menos convencionales, pero muy convenientes para las pymes.
El leasing es un tipo de arrendamiento mediante el cual el propietario te cederá los derechos de uso de determinado bien a cambio de una cuota. Los contratos de leasing pueden incluir todo tipo de bienes, desde equipamiento y vehículos hasta muebles, un local o una nave industrial. En el caso de los inmuebles, la duración mínima del contrato es de diez años pero con otros bienes se reduce a dos años.
Es una opción muy interesante para las pymes que están dando sus primeros pasos y no pueden realizar una gran inversión inicial para comprar los medios que necesitan.
También es una buena alternativa para mantener la liquidez pues en vez de comprar, simplemente alquilas pagando una cuota mensual.
Otro aspecto interesante del leasing es que, al terminar el contrato, tienes la posibilidad de comprar por el precio residual; es decir, descontando la cantidad que ya has pagado, lo cual te permitirá repartir el costo de bienes muy caros.
El factoring implica ceder los derechos de cobro de tus facturas a una empresa. En práctica, contratas a una empresa, denominada factor, para que te adelante el importe de las facturas que emites por la venta de productos o la prestación de servicios. A cambio de adelantarte ese dinero, la empresa cobrará una pequeña comisión.
Con esta estrategia las pymes pueden seguir cobrando sus facturas sin tener que esperar a que el deudor las pague. Conseguirás una liquidez inmediata sin solicitar un crédito bancario, de manera que podrás continuar con tu negocio.
Si eliges el factoring sin recurso, la empresa factor asumirá el riesgo de impago por parte del deudor, aunque esta alternativa también es más costosa. En el caso del factoring con recurso, serás tú quien responda en caso de impago de tus clientes.
En la mayoría de los casos las pymes también deben presentar avales económicos, que pueden dificultar el acceso al leasing o factoring. Sin embargo, con la garantía de ConAvalSí podrás negociar condiciones más ventajosas para tu negocio. Aportamos las garantías y avales necesarios para facilitar el acceso a líneas de financiación necesarias para hacer crecer tu negocio o poner en marcha tus nuevos proyectos de negocios.