Ray Kroc, el legendario promotor de McDonald’s, afirmaba que existen tres detalles esenciales para que un negocio sea exitoso: ubicación, ubicación y ubicación. Sin duda, en los negocios de venta al por menor o de servicios directos al cliente, la ubicación comercial puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Por eso, si estás pensando en abrir una actividad, deberías sopesar cuidadosamente la ubicación de tu negocio de cara al marketing y las ventas potenciales.
El barrio donde ubicar tu negocio dependerá básicamente del tipo de producto que vendas y el cliente que desees atraer, por lo que antes de elegir la ubicación comercial deberías hacer un breve estudio sociodemográfico. Si se trata de un producto de lujo, las millas de oro de las grandes ciudades son el sitio más adecuado, pero si es un despacho profesional o un negocio de servicios, querrás estar cerca de las zonas de influencia donde se mueven tus clientes potenciales. Un restaurante de comida rápida, por ejemplo, podría funcionar bien en las zonas universitarias, comerciales o empresariales donde abundan los clientes con prisas.
La accesibilidad es un detalle importante a la hora de decidir dónde ubicar el negocio. Las avenidas peatonales suelen ser una buena opción, sobre todo para los restaurantes y las tiendas, ya que cuanto más tráfico peatonal tenga la calle, más probabilidades habrá de que las personas entren a tu negocio.
La existencia de aparcamientos cercanos, una boca de metro o una parada de autobús es un valor añadido. Y no olvides que pequeños detalles como un simple semáforo o un paso de cebra pueden suponer el doble de tráfico para un local comercial que otro situado unos metros más arriba.
La localización de un negocio también dependerá del grado de competencia. Como regla general, no es conveniente ofrecer el mismo tipo de producto o servicio que los negocios cercanos, ya que cuanto mayor sea la concentración de competidores, más pequeños serán los márgenes. Al contrario, si los negocios no representan una competencia directa, su presencia suele aumentar las probabilidades de ventas ya que las zonas comerciales atraen más clientes. Por supuesto, existen excepciones, como las tiendas de muebles, que pueden aumentar sus ventas si se concentran en una misma zona pues al tratarse de un desembolso significativo, las personas prefieren visitar varios negocios antes de comprar.
Antes de elegir la localización de un negocio, sería conveniente conocer los proyectos urbanísticos previstos para la zona. Detalles como la peatonalización de la calle, la modificación del sentido de la circulación, la apertura de una boca de metro o pasar de aparcamiento gratuito a una línea azul o verde pueden marcar una diferencia importante en el funcionamiento del negocio.
En las ciudades, algunas aceras tienen más tráfico que otras, por lo que la diferencia de precio entre los locales puede ser considerable. Dado que cuando las personas caminan suelen mirar a la derecha, un local ubicado a la derecha del sentido del desplazamiento principal tendrá más éxito que uno situado en la otra acera.